en la tarde el chaco tenía la cara desfigurada de curao, su cara de mino cabrón ahora era una plasticina chistosa pegada en la cara. peliaba por mas chela, invitaba a todos, bailaba en el medio mostrando sus dotes ridiculos de breakdance. tiraba chistes y miradas brígidas entre segundo y segundo, y ahi caché que tenía el diablo.
Ahora ya era un poco mas de noche, y volvía el chaco con la cara tiesa. de palo impecable y y mandibula apretá. ahora sí que le entró el diablo, y ahi caché su cara ultra brígida y sus historias de muerte, carcel y empanás de coca.
quizás los minerales gastados del norte no tienen tanta culpa al final. la tierra esta mas redonda, plana, loca y revuelta que nunca.
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