La desición de vivir el presente y tirarme en picá al sentir profundo y transparente de una niña trajo penas, sorpresas y risas. Si no lo hubiese hecho estoy segura que hubiese traído penas, sopresas y risas también. La diferencia está en algo profundo dificl de explicar, y la satisfacción de haber sentido la sinceridad más plena de hace mucho tiempo. Los costalazos al final del piquero eran inminentes.
El concepto de eterno retorno quedó impreso en este pensamiento veraniego, de presencia presente, desde un libro del pasado pisado. Que volvía en un acto de retrofuturismo amado como ave pronosticada de tiempos añejos. El mismo concepto de eterno retorno me hablaba de acciones circulares, de acontecimientos que se repiten una y otra vez, un tiempo cirucular que nos obligaba a vivir una y otra vez lo mismo. Ok, de acuerdo! solo que yo lo llamo 'espiral' que representa para mi lo circular de la vida, pero con su evolución constante de superación, siempre pareciera ser lo mismo, pero nunca es igual, siempre será un poco mas elevado, en evolución constante, que pareciera ser circular, pero es espiral.
La emoción y un sol, el sentimiento y un mar me acogen una vez más. Un país quebrado moral y fisicamente, una pena profunda de decepción familiar, patriarcal y nacional. Un corazón grande para luchar, crecer y volar.
Un país y corazón que reconstruír.
el libro : 'la insoportable levedad del ser' de Milan Kundera
No hay comentarios.:
Publicar un comentario