una de las weas que más me duele es la forma en que ciertas veces en mi vida, y bajo mis propias maniobras, me auto-demuestre, sin la más mínima intención de aquello, una equívoca teoría mía. Sobre todo aquellas respecto al amor, a la justicia, la verdad y la vida. Es tremendamente doloroso, aunque nose si me duele mi orgullo, mi corazón, mi razón o mi quizás que.
Aunque nosé si será rabia o dolor. O la rabia es contra mí, o contra el otro.
Ya ni se que es todo esto. Las balas más dolorosas son las autoinfringidas. De todas maneras.
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